Durante los últimos años se ha producido un aumento desmedido de los envases de plástico desechables . Según un informe de WWF del año 2019, entre 2000 y 2016 se fabricó la misma cantidad de plástico que de 1950 a 2000.
Cuando nosotros consumimos productos en estos envases de plástico, estamos generando residuos. Desde hace unas décadas, esta situación está originando la creación de una capa de sedimentos, formada en gran parte por plástico.
Ana Villagordo, ambientóloga y especialista en estrategia y comunicación ambiental y diseño sostenible, explica en esta entrevista cuál es la causa por la que utilizamos tantos envases de plástico y cuáles son las claves para reducir los residuos que generamos cuando compramos productos con este material.
¿POR QUÉ USAMOS TANTOS ENVASES DE PLÁSTICO?
“Estamos en un mundo lleno de envases y podríamos preguntarnos por qué hay tantos y por qué tantos son de plástico. Esto tiene un motivo. Primero, cada vez envasamos más los productos porque el envase, en realidad, tiene una función: de protección, de información, de marketing -cada vez más-, incluso de almacenamiento y transporte. Es decir, los envases tienen razón de ser.
Pero cada vez envasamos más, precisamente por todas estas funcionalidades, y cada vez lo hacemos más en plástico. ¿Por qué? Porque uno de los sectores en los que más se envasa es el sector de la alimentación, y el plástico, como material, tiene una serie de cualidades y capacidades que permite que este envase sea el más ideal. Por eso, gran parte de los envases, sobre todo los envases desechables que son el problema que tenemos, están fabricados de este material.”
¿POR QUÉ SE HA INCREMENTADO EL VOLUMEN DE ENVASES QUE CONSUMIMOS?
“Cuando bajamos la basura, la bolsa de los envases es la que más ocupa porque son los más voluminosos. Pero, ¿por qué generamos tantos envases? Hay distintos motivos. Uno de ellos es porque cada vez consumimos más y además queremos envases cómodos que nos permitan monodosis o una mejor conservación y transporte. Consecuentemente, esto comporta la generación de más envases desechables.
También hay todo un tema de merchandising, que busca atraer a la ciudadanía, es decir, poner una información en el envase que hace que elijas aquel y no otro. Esto cada vez ha ganado más peso y está generando un sobreenvase. Un cartón sobre un plástico, un plástico sobre un envase… Y todo esto genera un gran problema a la hora del reciclaje final.
Por último, también por un tema de normativa. Cada vez la normativa de higiene, sobre todo en la alimentación, es más estricta. Por tanto, ha llevado a un sobreenvase de los alimentos y también de otros productos. Todo esto sumado hace que esta bolsa de basura de envase se nos llene a diario muchísimo y seamos conscientes de ello.”
¿QUÉ PODEMOS HACER PARA REDUCIR LOS ENVASES Y SUS RESIDUOS?
“Todo lo que compramos genera unos residuos para que en el ciclo de vida de los productos generemos residuos antes de que este producto llegue a nosotros: los materiales que han hecho falta para hacerlo, su fabricación, su transporte, etc. Pero una vez que debemos tomar la decisión de comprar, podemos pensar cómo consumir. Podemos pensar si realmente lo necesitamos o si podemos utilizar otra cosa que ya tengamos. Si podemos, sencillamente, saber lo que tenemos antes de ir a comprar otra cosa.
Esto va relacionado con nuestro estilo de vida, con tener tiempo para hacerlo, para hacernos estas preguntas, para hacer la lista de la compra y para pensar en ir de compras de forma consciente.”
¿QUÉ DEBEMOS TENER EN CUENTA SI COMPRAMOS PRODUCTOS ENVASADOS?
“Consideramos que tenemos ese estilo de vida consciente, pero ha llegado el momento de tener que comprar algún producto envasado. ¿Qué criterios debemos seguir?
Primero, evitar envases que no sean monomateriales, es decir, que mezclen materiales como el plástico y el cartón, porque esto dificulta mucho su reciclaje final. ¿Cómo sabremos si es de un solo material? Pues mirando la etiqueta, que habitualmente lo dice de forma clara.
Por otra parte, evitar envases pequeños monodosis y , sobre todo, envases sobre envases. Por ejemplo, yogures y encima un cartón, y encima un plástico. Por tanto, intentar comprar envases grandes para evitar los tetrabriks monodosis o los yogures pequeños o todo lo envuelto individualmente.
En tercer lugar, también están apareciendo nuevos materiales, materiales biológicos, incluso con algas o compostables. Si son compostables, es necesario mirar que tengan la certificación adecuada porque hay muchas autocertificaciones que no dicen la verdad. Sin embargo, el tema de los materiales es complicado y no sé si como sociedad estamos todavía preparados.
Por eso, siempre mirar qué material es y sobre todo conseguir que sólo sea un tipo de material. Creo que la clave también es preguntarnos si es necesario ese envase para consumir el producto, es decir, si nosotros mismos podemos llevarnos envases al comercio oa la tienda a la hora de comprar para evitar consumir ese envase. Esto sería comprar a granel. Por tanto, creo que esto está muy relacionado con los estilos de vida conscientes y consiste en, antes de salir de casa, coger lo que necesites para poder comprar generando los mínimos envases.”
¿Te ha parecido interesante la entrevista? ¿Eras consciente de la cantidad de residuos de plástico que generamos con nuestras compras?
Ven a la exposición Menja, Actua, Impacta y aprende más sobre el impacto del plástico en el medio ambiente y la importancia de reducir sus residuos.
Este artículo ha sido publicado originariamente en el portal web https://eat-life.fundesplai.org en el marco del proyecto europeo EAT:LIFE.